Fundación Woman’s Week y ARHOE continuan apostando por la educación

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La Asociación para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE) y FUNDACIÓN WOMAN’S WEEK siguen apostando por la educación como agente del cambio en el camino hacia una igualdad real y efectiva, la erradicación de la violencia de género y la conciliación familiar.
CARMEN INSTI
Carmen Mª García, presidenta de Fundación Woman’s Week, durante una de las sesiones del programa educativo ‘Generando valores’.

Los últimos resultados obtenidos de la macroencuesta de Violencia sobre la Mujer 2015, ratifican que el porcentaje de mujeres jóvenes de 16 a 19 años que han tenido pareja en alguna ocasión y que ha sufrido violencia de control en los últimos 12 meses asciende al 25%. Además, aún se está produciendo la trasmisión intergeneracional de mensajes tales como: “los celos son una expresión del amor” por lo que el porcentaje de chicas que han escuchado este consejo a menudo o muchas veces es del 35,8% y el de chicos del 36,8%. También se observa que casi tres de cada cuatro (73,3%) adolescentes, independientemente de su sexo, han escuchado este consejo de una persona adulta en alguna ocasión.

A esto hay que añadir que la juventud es ya nativa digital y el mal uso de las nuevas tecnologías -como los Smartphones o las redes sociales – puede agravar situaciones de violencia de género: por ejemplo, haciendo que descienda la conciencia de que algunas de estas conductas suelen formar parte del control abusivo o facilitando las oportunidades y medios para ejercer control o diversas formas de ciberacoso (el 25,1% de las chicas reconocen haber sufrido control a través del móvil).

Los estudios indican también que uno de cada tres jóvenes considera inevitable o aceptable en algunas circunstancias ‘controlar los horarios de la pareja’, ‘impedir a la pareja que vea a su familia o amistades’, ‘no permitir que la pareja trabaje o estudie’ o ‘decirle las cosas que puede o no puede hacer’.

Carmen Mª García, presidenta de la FUNDACIÓN WOMAN’S WEEK, también quiere destacar que “Existe poco compromiso cierto en los programas electorales. La FWW reivindica compromisos reales y medidas concretas, porque las mujeres somos mucho más que un caladero de votantes al que acudir cada cuatro años, un número al que recurrir para las elecciones como voto cautivo”.

Por todo esto, la educación es la única vía para cambiar la cultura y los valores sociales, todo ello con un programa concreto de sensibilización en escuelas dirigido a profesores y padres, pero sobre todo, a los propios adolescentes.

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